EL PAJARILLO VALIENTE

Era una tarde de lluvia, en la que de vez en cuando se asomaba el sol.
Un pajarillo pequeño, de los que viven en el jardín de los abuelitos, al ver el sol tan brillante pensó: -"¡  Hora de volar !" Se salió de su nido con un pequeño aleteo y ¡Zs!,cuando quiso mover sus alas se fue cansando y ¡ en que se vio de poder aterrizar en el suelo !,
Rodolfo, que como otros caracoles estaba tan contentos disfrutando de la lluvia, se llevó un susto al ver al pajarillo dando aleteos sin coseguir volar y el pajarillo al caer al suelo  y ver a Rodolfo tan de cerca, pensó. "  ¿ Me comerá?".
Todos nuestros amigos del jardín, incluido Angargo se pusieron a avisar a la mamá pájaro y enseguida y le empujaba en la colita, animándole a emprender el vuelo. Angargo le ayudó a entrar en el cesped y todos lo animaban y aplaudieron cuando el peqiueñin junto con su mamá emprendieron el vuelo y consiguió volver al nido. Y colorín colorado este cuento por hoy se ha terminado
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Colorear

Los trabajos manuales les han encantado siempre a vuestros papás y mamás. Cuando eran pequeñitos en cuanto que ya fueron capaces de coger un lápiz o unas ceras, ya estaban haciendo creaciones..

Ahora a las que les encanta hacer cosas bonitas es a vosotras,¡hasta Elvira ya pinta!

¡ Y es que

queda tan bonito cualquier cosa coloreada!

MISSY

Hace unas cuantas semanas " se coló" en el jardín un gato pequeñito y desorientado que no tenía fuerzas ni para maullar. Mª Angustias y los abuelitos lo vieron acercarse y su aspecto era tan desastroso que comentaron: -¿ Cómo habrá tenido fuerzas para llegar?
 Mª Angustias entró en la casa y volvió con un cuenco con leche y al ver que se acercaba a beber, también le desmigó mollitas de pan, después se acurrucó entre las matas y se durmió.
 A la mañana siguiente, cuando vio "movimiento en el jardín", comenzó con sus maullidos como diciendo : - ¿ Os acordáis que estoy aquí ?  y con su carita de pena y sus andares inseguros nos ponía en alerta para ponerle leche y miguillas en el cuenco.
 Ahora que ya tiene mas fuerzas y confianza, cruza por la celosía de un jardín al otro y para disfrute de todas nuestras nietecillas, asoma la carita, vuelve la espalda y mueve el rabito, persigue a una mariposa y cuando ya ve que se sube en el coche, él salta desde la celosía a las losetas para que las niñas vean sus piruetas y le digan: - ¡Adios Missy!
 Se siente tan feliz en nuestros jardines que de seguir así de bien no tardará en creerse protagonista de toda la calle . ¿Habrá un duelo entre Coco y Missy?
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